El primer texto de este blog se publicó el 19 de enero de 2008.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Hay cosas realmente raras.

En breve cinco sospechosos de haber planeado el ataque terrorista al World Trade Center en 2001 serán procesados por una corte civil de Estados Unidos en South Manhattan, New York, muy cerca del lugar donde las torres gemelas fueron derribadas por dos aviones secuestrados por extremistas islámicos, según las versiones oficiales sobre este tremebundo hecho.
Inmediatamente de conocerse tal decisión hubo quien consideró el peligro de un ataque terrorista al lugar donde se desarrolle el mencionado juicio, lo cual, aseguran las autoridades, es prácticamente imposible; por otra parte, se ha querido dejar saber de la garantía de “un proceso justo” a estos acusados aún en la categoría de sospechosos pues según la justicia norteamericana se es inocente hasta demostrarse lo contrario y ciertas cosas sólo son verdad si así lo acredita un juez.
Me parece una burla a la lógica pensar en un juicio “justo” trayendo a los criminales al lugar de los hechos; en muchas ocaciones, menos graves, en Estados Unidos se trasladan los procesos judiciales a estados alejados de donde se cometió el crimen y se trata de reclutar un jurado imparcial no permeado por las opiniones de la prensa o prejuicios de ningún tipo ¿Cómo puede ser esto posible en el caso mencionado?
También me hago la pregunta de cómo puede ser tratado este caso en una corte civil norteamericana cuando estamos hablando de ideologías diferentes y de un hecho que ha desatado el conflicto entre dos naciones; la motivación de estos criminales están más allá de la comprensión de la propia justicia norteamericana; la cual los tratará como criminales comunes, asesinos de miles de víctimas como cualquier otro asesino múltiple ya sea un francotirador en los alrededores de la capital o un padre de familia ultimando a au familia... la falta de precisión en este asunto puede ser injusta para quienes necesitamos más explicaciones aunque probablemente la decisión final sea la misma y todo ese desdibujo de las cosas sea muy a propósito.

Por cierto, el reciente asesino a mansalva de sus compañeros en la base militar de Fort Hood probablemente se libre de la pena de muerte por ser militar al ser procesado por una corte marcial la cual no hace una condena de esta naturaleza desde hace dos siglos al parecer por una especie de “protección” a sus “afiliados”… ya se dijo “entre bomberos no se pisan las mangueras" si bien, valga la aclaración, no estoy a favor de la pena capital.
Por otra parte los estadistas y militares a quienes se les ha encontrado sospechosos de crimenes de lesa humanidad o de guerra han sido procesados hasta hoy en cortes internacionales y considero que este es el caso, asi se trate de "militantes" como se les llama, de un grupo beligerante irregular; como considero que si atendemos a la justicia hasta sus últimas consecuencias debería también presentarse en corte quien en aparente espíritu de venganza (pues otros eran sus motivaviones) y engañando a su país no sólo llevó al ejército norteamericano a pelear en Afghanistán para, supuestamente, buscar al aun sin paradero conocido, lider de Al Quaida; sino que se las ingenió para abrir otro frente y con constantes justificaciones sin base y en contra de la voluntad del mundo llevó al caos a Irak y provocó la muerte y mutilación innecesaria de millares de familias. Aunque todos pensamos inmediatamente en George W. Bush recuerden que este es la cara de una élite quienes defienden sus intereses de poder fianciero y de todo tipo, no sólo defienden sino son agresivos para imponerse y aplastar a todo lo inconveniente a un sistema diseñado a acrecentar sus ganancias como bola de nieve de generación en generación.
Hay mucha confusión desde el principio en todo esto y en estas guerras, en el espíritu anti-musulmán inyectado, en el engaño para reclutar soldados jóvenes con vanas promesas, en el propio objetivo de la guerra y en las veinte maneras de ver la crisis económica menos en el gran gasto bélico de la nación durante todos estos años. Si verdaderamente se hubiera querido evitar una confrontacion y nuevos ataques de los extremistas musulmanes se hubiera trabajado en la comprensión de por qué podía estar proliferando un sentimiento antioccidental en algunos sectores de paises de mayoría musulmana; por qué muchas madrasas han devenido en escuela de terroristas; pero nada de eso interesó y se fué a las armas dando alimento a aquellos de ideología torcida, prevaricadores del propio Islam.
Todas estas cosas vienen a mi mente cuando escucho la tontería de hacer un juicio a estos cinco hombres lo cual, como suele suceder en todos estos casos, no resuelve nada.

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