Casi nunca abordo el tema Cuba no sé si por estar harto del asunto tras diecisiete años en Estados Unidos (más de la mitad de estos en dos períodos en Miami ) o porque no considero esto algo influyente para el decursar de la política global como lo son la lucha por el control de las rutas del petróleo por los grandes poderes y otros temas tocados ne este blog… sin embargo como quiera que también abordo los conflictos de Africa y he mencionado asuntos como el terremoto de Chile o la saga de Honduras Michelleti vs. Zelaya es justo poner mis ojos en la isla donde nací promotora de no pocas álgidas discusiones en esta capital del sol donde vivo desde 2006.
Una de estas confrontaciones, a veces a gritos y jalones se dió cuando Juanes decidió hacer un concierto en La Plaza de la Revolución en La Habana, tribuna de tanto discurso politico oficial en Cuba; la locación más que el propio concierto, levantó en “pie de lucha” a la comunidad cubana en Miami; otra cosa molesta era el nombre de “concierto por la paz” en un pais donde tanta represión y apoyo a guerras ha habido… cada invitado a la cita musical era analizado en emisoras de radio y canales de television miamenses; antes, durante y después del concierto se especuló del impacto de este en la dormida conciencia de los cubanos de la isla. La apertura de Olga Tañón diciendo “es tiempo de cambio”, el cierre con un fallido intento de Miguel Bossé de contagiar al público con un gesto imitando un vuelo de pájaro, la parquedad de Silvio Rodriguez y la actitud “friendy” de Amaury Perez con los invitados apuntaba a cierta diferencia con conciertos anteriores amén del sitio y la masividad en asistencia además de la cantidad de artistas de diferentes categories allí presentes.
...se estuvo hablando por meses de esta presnetación de Juanes en La Habana; posiblemente fue el tema cubano más abordado hasta las recientes represiones a Las Damas de Blanco paralelo a la muerte del preso de conciencia Zapata y seguido de la huelga de hambre de Fariñas. Excéptico siempre a los esfuerzos de mis compatriotas por lograr algo en el monolítico poder de los Castro sentí pena por estos sacrificios para mi en vano y una vez más descreí las palabras de la importancia de la muerte de Zapata y el gesto de Fariñas sin dejar de respetar y admirar tales cosas.
Volviendo al concierto una vez este terminó un grupo armó una “conguita” cantando que ellos disfrutaban en La Habana mientras nosotros sufriamos en Miami, un remedo de la sabia frase popular “para qué sufres con lo que otros gozan” lo cual develaba el pensamiento del cubano promedio ni medianamente enterado de las connotaciones políticas de algunas cosas, de hecho en Cuba NO se conocen a los disidentes… quizás esto hya cambiado un poco en los últimos años debido a la posibilidad de ver algunos programas de television de Miami allá pero en esencia no se vive pendiente de estas cosas: conseguir el pan del desayuno o algo para almorzar es más vital.
Poco a poco el concierto de Juanes, Miguel Bossé, su segundo protagonista, la participación de la Tañón, se ron fueron en fade y en unos meses pudimos constatar cómo no sólo se sigue reprimiendo salvajemente a quienes piensan diferente sino que ante una turba masacrando a quienes protestan hay un montón de curiosos de brazos cruzados, con mirada resignada, temerosa y a veces hasta indiferente al hecho, solo allí “para ver qué pasa", en son más bien de chisme. Para mi sorpresa la muerte de Zapata y la valiente actitud de su madre han dado al traste con el reconocimiento internacional de muchas cosas no vistas en cincuenta años; de más está decir lo bien puesto que los tiene Fariñas.
Comparando el gran concierto de Juanes con toda la promoción propiciada por sus propios detractores veo cómo dos hombres comunes y unas madres y esposas hastiadas de la indiferencia han levantado un movimiento mundial que ha hecho reaccionar al cínico gobierno de Cuba con una respuesta ridícula (un concierto convocado por Silvio Rodriguez) y las mismas palabras manidas de siempre.
Sé que el camino para el cambio en Cuba todavía es largo, que la salida del closet de Ricky Martin le robó protagonismo a las Damas de Blanco en las primeras planas (asi somos)… pero hay una gran diferencia entre ese concierto y los sacrificios de estos patriotas cubanos, supongo que ya tenga respondida la pregunta del título.
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