Dejaré esta nota para los detractores del fenómeno cultural del spanglish en Miami, ciudad donde he presenciado debates, discusiones, foros y publicaciones sobre el tema.
El spanglish como un elemento más de la asimilación de una cultura, la predominante, por quienes emigramos y quizás pensemos estar dominando, que si es innegable la fuerte influencia de los hispanos en Estados Unidos y en especial en el sur de La Florida; la estructura no la aportamos nosotros.
Para los desconocedores del tema estoy hablando de la lengua que muy pronto comenzamos a hablar para hacernos entender por estos lares; no estoy hablando de las bararbasadas del castellano de quienes por vagancia, más que por ignorancia, cometen hasta los locutores de las cadenas de televisión hispanas, supuestos enclaves de la cultura hispana en este territorio ¿conquistado? ; estoy hablando de el echar mano a denominaciones más comunes a quienes viniendo de diferentes partes de América Latina llamamos las cosas de diferente manera en la amplia gama de nuestro rico y ramificado idioma.
También hay que ver en el spanglish el fenómeno generacional donde la segunda generación, tan “cool”, antes de preguntar cómo se dice tal o mas cual cosa la someten a su cómoda asimilación del inglés y el español.
Para los ortodoxos de la lengua quizás “suene” feo ese de “printear” por imprimir o “escanear” por…. se me ha olvidado el término en castellano…También puede parecer inadecuado en medio de un speech en español insertar algo en inglés pero les digo, amigos, la lengua, como toda la cultura se gesta, nadie la planifica y eso es lo que está sucediendo es esta ciudad norteamericana de apabullante inmigración hispano-parlante; no queda más remedio que aceptar eso; además la mayoría de quienes vienen no lo hacen para defender una cultura ni un idioma, vienen a buscarse la vida. a vivirla como venga con sus oportunidades y rechazos y en ese vaivén se habla como salga, cómo más fácil sea a veces, algunos sin haber aprendido del todo el idioma de su país o alternando con un idioma en la casa y otro en la escuela o trabajo.
Cuando los romanos conquistaron el mundo el latin se mezcló con las lenguas “bárbaras” y en Roma seguramente se hablaba una mezcla de todo; las lenguas “vulgares” son ahora los idiomas modernos los cuales han evolucionado (sólo hay que leerse el Mio Cid en versión original para darse cuenta de ello)… ¿podríamos hoy volver a hablar latín o las lenguas originales de cada región antes de ser conquistada?
Dejemos pues a la Real Academia de la Lengua Española conservar los valores del idioma, dejemos que quizás en España se exija con el más estricto rigor los dogmas de esta fe en un idioma inamovible para que estos señores no “flipen” ante alguna palabra fuera de su diccionario; en América ya han cambiando las cosas desde hace mucho y cada región, porque ni siquiera podemos hablar de la artificial frontera política que nos divide en países, tiene su acento, su pronunciación su manera de nombrar las cosas cuanto más cuando venimos a otro lugar; aplaudo el esfuerzo por hablar bien un idioma u otro, y ambos, pero no es para horrorizarse ni para excomulgar a quienes los autores de esos idiomas: la gente que habla a diario en la calle, en la vecindad, nunguna palabra fue inventada en una academia de idiomas.